Actualidad para profesionales de la odontología
22 sep 2017
La hipersensibilidad dentinaria (HD) o hipersensibilidad dental se define como un dolor breve y agudo provocado por la exposición de la dentina a agentes térmicos, táctiles, osmóticos, químicos o estímulos evaporativos, y que no es compatible con ningún otro defecto o enfermedad (1).
La HD puede tener graves repercusiones sobre la salud bucal y la calidad de vida de las personas que la padecen. En ocasiones resulta muy molesta durante las comidas y bebidas y, por lo tanto, el paciente disminuye la ingesta de algunos de sus alimentos y bebidas favoritas, lo cual puede afectar a su estado de ánimo. También puede ser muy molesta al cepillarse o incluso al respirar. Por este motivo, el paciente, para evitar el dolor, tiende a disminuir la dedicación y la eficacia del cepillado, lo cual favorece la acumulación de placa dental y aumenta el riesgo de caries cervicales, gingivitis y periodontitis.
La HD puede afectar a una de cada cuatro personas de la población general. Aparece sobre todo en mujeres jóvenes, entre los 18 y los 30 años, y los dientes más afectados suelen ser los caninos y los premolares(2).
Entre los pacientes de la consulta dental, los más afectados por la HD son los pacientes periodontales (60-98% de los mismos). Después del raspado y alisado radicular, la HD puede afectar a un 55% de los pacientes y hasta a un 88,2% de los pacientes tratados con cirugía periodontal. Asimismo, puede ser motivo de abandono del mantenimiento periodontal en un 12% de los casos.
La etiología de la HD se debe, por un lado, a la exposición de la dentina al medio bucal por la pérdida de esmalte en la corona y la pérdida de cemento junto con recesión gingival en la raíz.
Al darse estas situaciones, los túbulos dentinales no deben, quedan expuestos o quedan abiertos entre el medio bucal y la pulpa. De este modo, el movimiento del fluido tubular contenido en los túbulos produce una estimulación de las fibras A-delta que rodean los odontoblastos, transmitiendo el impulso nervioso a la pulpa dental y provocando la respuesta dolorosa(3). Así, un estímulo de tipo térmico, químico o táctil, que en condiciones normales no provocaría dolor, produce un dolor muy intenso y que se limita a la duración del estímulo.
La causa principal de la pérdida de tejidos duros dentales es la abrasión, sobre todo a nivel del cuello de los dientes y en combinación con la erosión, la atrición (ya sea fisiológica o patológica), la abfracción en los cuellos dentales provocada por trauma oclusal y la erosión causada por sustancias ácidas, ya sean intrínsecas o extrínsecas.
La pérdida de encía o recesión gingival puede estar asociada a diversas causas como la abrasión por un cepillado agresivo e incorrecto, un biotipo gingival fino, algunos procedimientos periodontales e, incluso, la tracción de los frenillos bucales en zonas con poca encía queratinizada.
El diagnóstico de la HD se realizará según los siguientes pasos:
1. En primer lugar, se hará una historia médica detallada con la anotación de todas las enfermedades y trastornos relevantes, como por ejemplo situaciones en las que hay más vómitos. Asimismo, hay que prestar especial atención a la medicación que toma el paciente y a los estilos de vida y hábitos dietéticos de tipo ácido que puedan tener repercusión sobre la condición.
2. En segundo lugar, se realizará la historia dental y se preguntará por el tipo de dolor: cómo es, cuándo aparece, qué lo provoca y cuánto dura. También se detallará el tipo y la frecuencia de higiene bucal diaria que realiza el paciente.
3. Acto seguido se procederá al examen clínico para descartar otras enfermedades, como caries, gingivitis o pulpitis, que muestren la HD como síntoma. También se observará si existen lesiones como abrasión, erosión o recesión gingival en los dientes afectados.
4. Para confirmar el diente y el área precisa afectada, se pueden reproducir los estímulos que causan sensibilidad mediante agua fría, aire, estímulo táctil con sonda, etc. Con todo ello podrá establecerse el diagnóstico diferencial de HD y, si se confirma el diagnóstico, se procederá a su manejo clínico.
Antes de iniciar el tratamiento, se deben establecer una serie de medidas preventivas para prevenir la ocurrencia y cronicidad del proceso. Esto requiere un cambio de hábitos y evitar factores predisponentes. Hay que evitar las causas que conducen a la exposición y la apertura de los túbulos de la dentina al medio bucal, mejorando así la eficacia del tratamiento ambulatorio. Esto se basa en el asesoramiento nutricional, junto con las instrucciones sobre higiene bucal y la corrección de malos hábitos.
A nivel dietético se debe eliminar o reducir la ingestión de bebidas y alimentos ácidos, incluyendo aquellos que no parecen ácidos y se consumen comúnmente como yogur, vino blanco y tinto, bebidas gaseosas, etc. Asimismo, hay que prevenir la presencia de ácidos en la boca en los pacientes que vomitan habitualmente, con recomendaciones como beber agua abundante y usar irrigación o aerosoles en lugar de cepillado para las áreas posteriores.
Respecto a la higiene bucal diaria, se deben utilizar cepillos apropiados con filamentos suaves de PBT y perfil cónico junto con una pasta dentífrica de baja abrasividad. El método de cepillado se realizará con técnicas similares a las del tratamiento periodontal, en las que los filamentos se colocan a nivel del surco para eliminar la placa del margen gingival, como en la técnica de Bass. Asimismo, se recomienda esperar al menos 10 minutos después de comer o beber sustancias ácidas para cepillarse. De este modo, la saliva puede amortiguar la bajada de pH que se produce y favorecer que se precipiten los minerales sobre la superficie del diente. Esto ayudará a evitar la eliminación de esmalte y dentina a causa del cepillado y a prevenir la abrasión de los cuellos dentales.
Por último, para la corrección de malos hábitos se recomienda evitar el uso de palillos, morder las uñas o morder bolígrafos, los piercings bucales y, si existe bruxismo, corregirlo mediante férulas de descarga.
En cuanto al tratamiento de la HD, siempre se empezará por los tratamientos menos invasivos y, si éstos no resuelven la condición, se irán introduciendo técnicas y procedimientos de mayor calaje.
Para el tratamiento ambulatorio se pueden utilizar pastas, colutorios y geles desensibilizantes que pueden presentar dos acciones. En primer lugar, y como tratamiento más clásico, se utilizan las sales de potasio, que ejercen una acción química sobre los túbulos dentinarios abiertos. El potasio es capaz de elevar el umbral de excitación de las fibras nerviosas a través de la bomba de sodio-potasio y, de esta forma, disminuir la transmisión del impulso nervioso. Este tratamiento es muy efectivo y requiere de cierto tiempo para lograr su cometido.
En segundo lugar, se utilizan productos que incluyen una acción física de sellado de los túbulos dentinarios. Existen diferentes tecnologías pero una de las más novedosas es la que incluye las nanopartículas de hidroxiapatita. Al tener una composición similar a la del diente natural, pueden depositarse alrededor de la dentina peritubular hipermineralizada, de forma que pueden ocluir parcial o totalmente la luz de los túbulos, disminuyendo así el movimiento del fluido intratubular e impidiendo la aparición de dolor. Su gran ventaja es la inmediatez del efecto y su resistencia al lavado y a los ácidos, ya que su unión con el diente es muy resistente.
En el caso de que la HD no remita con el tratamiento ambulatorio, se podrán realizar otro tipo de tratamientos clínicos que ayuden a reducir o eliminar el dolor mediante el cubrimiento de la dentina expuesta, ya sea con resinas y/o composites que ocluyen la luz de los túbulos y pueden ayudar a recuperar la morfología del diente, con cirugías mucogingivales para el recubrimiento de la raíz expuesta, o con una combinación de ambas técnicas en muchos casos.
Sólo en casos de dolor extremo, y cuando éste sea muy limitante para la vida diaria del paciente, se recurrirá a la endodoncia o, en último lugar, a la extracción del diente.
Dr. Xavier Calvo,
Periodoncista y Medical Advisor de DENTAID
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